Cuchillos

Para saber con qué cortar!
Hoy les voy a contar un poquito sobre los diferentes tipos de cuchillos que se pueden encontrar en una cocina profesional. Hay una gran variedad de tamaños y formas que dependen del propósito para el existen.

Las partes del cuchillo:

Cuchillo de cocinero o de chef: Es el más importante de todos, el que no puede faltar ni siquiera en la casa de cualquier persona aunque no le guste cocinar (siempre va a tener que cortar al menos un tomate). No es para un uso específico, se puede emplear para casi cualquier cosa, ya sea cortar una cebolla, trozar un pollo o un pescado. El tamaño varía desde los 12cm hasta los 20cm de largo de la hoja. Se utiliza para casi todas las recetas.

Cuchillo de oficio: es el segundo en orden de prioridad en el bolso de un cocinero. Su hoja mide 10cm. Se emplea para pelar vegetales y para trabajos de precisión, como tornear una papa, cortar ajo o realizar decoraciones con vegetales.

Cuchillo torneador o pico de loro: se utiliza específicamente para tornear y tallar frutas y verduras. La lámina tiene de 5 a 6,5cm. El nombre “pico de loro” viene de la forma que tiene.

Cuchillo fileteador: se utiliza para filetear pescado, tiene una lámina de unos 18cm.

Cuchillo para pan: es de lámina rígida y dentada, con lámina de entre 25cm y 30cm.

Hachas: se usan para cortar hortalizas.

En cuanto al tamaño a elegir en cada tipo de cuchillo se debe tener en cuenta la comodidad del usuario. Un cuchillo grande para una mano pequeña puede entorpecer el trabajo. Por el mismo motivo conviene también tener en cuenta el uso que se le otorgará al cuchillo. Por ejemplo, si se va utilizar para cortar hormas de queso fresco (también llamado cremoso o cuartirolo) es mejor tener un cuchillo con hoja larga para poder realizar el corte de una sola vez y haciendo presión con ambas manos.

En referencia al material del cuchillo los precios varían mucho. Cuando compramos un cuchillo para tener en casa, por lo general hablamos de uno de acero inoxidable. Es un material confiable y perfectamente aplicable a una casa.

Para una cocina profesional, conviene la aleación de molibdeno-vanadio. Son metales muy nobles que no se destemplan con el afilado y por lo tanto, el filo dura mucho más. La diferencia económica de la que les hablo va desde los $50 de un cuchillo de acero inoxidable hasta los $200 de uno de molibdeno-vanadio.

Tallarines caseros

Ideal para un día fresco
Buen día!!! Que cambio con el clima por Dios!!! En la ciudad de Córdoba tenemos una temperatura de 13° C, el cielo está nublado, la humedad es del 17%. Tenemos una presión de 981.2 hPa (hectopascales) y viento sur de 20 km por hora.

Ahora, no se atrevan a negarme que con éste clima se mueren de ganas de comer algo rico y calentito.

Yo me acordé de los tallarines caseros que hice en mi primer viaje a La Rioja en el año 2007, en Octubre. Virginia y yo nos habíamos puesto de acuerdo para llegar el mismo día y sorprender a María, nuestra hermana. Para Virginia es una hermana de sangre, para mí es una hermana de la vida. Así que yo la quiero más, porque yo la elijo como hermana, en cambio, a Virginia no le queda otra que quererla…

Llegamos de sorpresa para festejar el cumpleaños de María. Nos acostamos bastante tarde y, por ende, nos levantamos bastante tarde. Yo quería deleitar a mis amigos con mis tallarines caseros. No me podían sacar la idea de la cabeza.

Me levanté y me fui a comprar lo que hacía falta. Empecé a amasar a las 2 de la tarde, tenía que hacer pasta para 4 personas. Sabía que una porción moderada no  nos iba a alcanzar así que hice más de la cuenta.

Mientras la masa reposaba (necesario para que después se pueda estirar correctamente), empecé a preparar la salsa. Teníamos un presupuesto escaso, por lo cual, en lugar de comprar carne, usé la que había sobrado del asado de la noche anterior.

Almorzamos a las 6 de la tarde, pero lo disfrutamos como si fuera la última vez. Espero que ustedes los disfruten tanto como nosotros aquel día!

Ingredientes:

Masa (4 porciones):

Harina 400gr

Huevos 3-4

Sal c/n

Aceite 40cc

Salsa Naty:

Pulpa de carne 400gr

Puré de tomate 350gr

Cebolla 1

Pimiento rojo 1

Agua c/n

Cebolla de verdeo 1 ramita

Sal

Pimienta negra y blanca

Pimentón extra

Azúcar 1cdita

Laurel 2 hojitas

Perejil picadito c/n

Procedimiento:

Masa:

Formar una corona con la harina sobre la mesa de trabajo. Colocar la sal sobre la harina y en el centro los ingredientes líquidos (huevos, aceite). Integrar de a poco todos los ingredientes hasta formar una pasta. Amasar con paciencia y mucho amor hasta obtener un bollo hermoso, liso, suave y elástico. Elástico quiere decir que si se hace presión con un dedo la masa vuelve, no queda un hueco en el bollo. Una vez listo se deja reposar el mayor tiempo posible, por lo menos ½ hora.

Salsa:

Cortar la cebolla y el pimiento en brunoise y la parte blanca de la cebolla de verdeo en juliana fina. Picar la carne a cuchillo en trocitos no muy grandes, aproximadamente de 20 cm de largo por 1 cm de ancho. Saltear la cebolla, el pimiento y la cebolla de verdeo en un chorrito de aceite con una pizca de sal. Cuando haya transparentado la cebolla, agregamos la carne ya cortadita y la sellamos. Una vez listo esto se agrega el puré de tomate y un poco de agua para alivianar la salsa. Se pone en este momento el laurel para que poco a poco vaya soltando sabor y aroma. Se deja reducir, lo cual produce una concentración de sabores, motivo por el cual no es conveniente condimentar antes de esto. Una vez lista la salsa se agrega la sal, pimienta, pimentón y azúcar para quitar un poco la acidez del tomate.

Por otro lado ya deberíamos tener la pasta cocida. Se coloca 1 litro de agua por cada 100gr de pasta con sal gruesa. Una vez que el agua hierve se tira la pasta por espacio de unos 15 minutos. Cuando está casi cocida se cuela y se coloca en la olla de la salsa para terminar la cocción ahí, de esa manera la pasta absorbe los sabores de la salsa. Se sirve en una fuente o en cada plato y se espolvorea perejil picado por encima, el perejil aporta mucho aroma y un hermoso toque de color.

Espero que les haya gustado!!! 

Carne mechada (de papá)

Cocinando con papá

Como ya saben, a mí me gusta la cocina desde tiempos inmemoriales. Hoy por hoy sé que es una afición heredada de mi papá, quien tiene su negocio de comidas para llevar. Cada vez que vuelvo a casa para las vacaciones paso largas horas con él ayudándolo y, sobre todo, aprendiendo.

Una de las últimas veces que estuve allá me enseñó una receta exquisita que hoy quiero compartir con ustedes. No quiero robársela, sepan que es una receta de su autoría.

Ingredientes:

Tapa de nalga 1kg aprox.

Cebolla ½

Pimiento ¼

Panceta ahumada 150gr

Aceto balsámico

Ajo 2 dientes

Laurel 1 o 2 hojas

Romero 1 ramita

Margarina 40gr

Aceite c/n

Procedimiento:

Cortar la panceta lo más chiquita posible. Cortar la cebolla y el pimiento en brunoise (cuadraditos chiquitos). Poner en una sartén al fuego la panceta sola (sin aceite ya que la panceta se desgrasa y con eso es suficiente).

Hacer un agujero a lo largo del trozo de carne con un cuchillo serruchito, ahí colocaremos la mezcla de cebolla, pimiento y panceta (También se puede abrir la carne en forma de libro y luego atar para que quede rellena y con una forma agradable). Salpimentar.

En una cacerola poner un chorrito de aceite y la margarina, el laurel, el romero y el ajo. Cuando el aceite esté caliente se coloca la carne para dorarla por todos sus lados. Luego se agrega un chorrito de aceto y se deja cocinar a olla destapada. Si se seca mucho se puede agregar un poco más de aceto. El aceto le proporciona a la carne un sabor agridulce delicioso pero casi imperceptible. esto convierte esta carne en un plato ideal para acompañar tanto con un simple puré de papas como con un puré de manzanas.

Nota: Se puede reemplazar la panceta ahumada por la salada, en cuyo caso, es indispensable tener en cuenta que la panceta aportará una buena cantidad de sal a la preparación.
Es conveniente usar romero en rama por que si se utilizan solo las hojitas es inevitable comerlo y el romero es muy buen aromatizante, pero no es muy rico para comer.

Es una receta exquisita y muy fácil de hacer, así que no tienen excusa!!!

Osobuco con batatitas caramelizadas

Cocinar con lo que hay

Buenas noches mi gente!!! Estamos en un momento del mes en el que no tenemos un peso. Es por eso que la receta de hoy es bien barata. Anoche me encontré en esa situación de tener que preparar una cena con lo que había en la heladera. Pensé: ¡¿Qué hago?! Miré todos los rincones de la heladera y encontré: una cebolla, un pedacito de pimiento rojo, una ramita de puerro, 3 rodajas de osobuco y un par de batatas. Estuve un buen rato pensando que hacer con esos ingredientes hasta que se me ocurrió algo.

Esa es la receta que les traigo hoy. Créanme que quedó riquísima y nos llenamos. Miren la foto y díganme si no es tentador…

Ingredientes:

Osobuco 3 rodajas

Pimiento rojo un pedacito

Cebolla 1

Puerro 1 ramita

Batatas 3 – 4

Vino blanco 1 vaso (opcional)

Miel c/n

Procedimiento:

Pelar las batatas (con el pelapapas) y cortarlas en rodajas, preferentemente del mismo grosor. Blanquearlas y reservar. Saltear en una cacerola la cebolla y el pimiento cortados en juliana fina. Colocar  las rodajas de osobuco en la misma cacerola y sellarlas. Picar el puerro chiquitito y agregarlo a la preparación. Si tienen el vino, éste es el momento de agregarlo. Dejar la cacerola destapada para que se evapore el alcohol del vino, mientras se termina de cocinar la carne.

Por otro lado, colocar un pedacito de manteca en una sarten (se puede reemplazar por un chorrito de aceite si no tienen manteca o si quieren incorporar menos calorías). Poner ahí las batatas para que se doren, condimentar con sal y pimienta negra. Una vez doradas se les coloca por arriba un chorrito de miel que logra un sabor agridulce ESPECTACULAR!!!

Espero que les haya gustado la receta. Cabe aclarar que como es una comida hecha con “lo que tengo en la heladera”, se puede reemplazar la carne por otro corte, las batatas por papas o zapallo (el coreanito queda muy rico preparado de esta manera).

Hasta la próxima receta!!!

Pizza con masa de espinaca

La pizza puede ser light!!!

Hola mi gente! Lo prometido es deuda, he venido a dejarles una nueva receta.

La mayoría de ustedes ya debe estar al tanto de que ayer me trepé al Uritorco, sin embargo no quiero dejar de contarles un poquito de mi aventura. Viernes a la tarde Marco y yo salimos de casa con el auto lleno de cartones y colchas para la carpa que Lucas y Gise iban a llevar (reconozco que le tenía miedo al frío ya que estamos en pleno invierno, aunque el clima era más que agradable). Llegamos a Capilla del Monte y empezamos a buscar el camping en el que Lucas y Gise ya habían acampado y decían que era hermoso.

Llegamos de noche y en aquel lugar no había nadie. Fue por eso que terminamos en el Camping Municipal durmiendo en un “dormi” (pequeña habitación con cuatro camitas).

Una vez instalados y luego de haber calentado los cuerpos con unos traguitos de piña colada, salimos a caminar en busca de un lugar donde pudiéramos comer algo rico y barato. Paseamos mucho, encontramos lugares muy bonitos y muy curiosos. Por ejemplo un lugar con un nombre rarísimo que ahora no recuerdo pero que suena parecido a “budismo”, pensé que tenía algo que ver con esa religión. La realidad es que no tenía nada que ver. Simplemente era un lugarcito donde podías comer una sopa de verdeo y algo más mientras exhibían una rara película francesa (una road movie: película de ruta, que transcurre en una silla de ruedas). No entramos a ese lugar.

Pasamos por una esquina que tenía un lugar muy pintoresco donde preguntamos el precio de la pizza y la verdad es que estaba muy barato así que nos quedamos ahí.

Pedimos una muzzarella. Estaba espectacular. La masa super casera, riquísima. Me llené, y además mi corazón quedó chocho porque la pizza es una de mis comidas preferidas.

Es por eso que hoy quiero brindarles la receta de la pizza, pero como estamos en esa etapa del año en la que nos volvemos locos por las dietas, les dejo una versión de pizza bastante Light. Espero que la hagan y la disfruten… recuerden: Light no significa feo.

Ingredientes:

Masa:

½ paquete de espinaca procesada

1 huevo

Harina integral 300gr

Polvo para hornear 1 cucharadita

Nuez moscada

Sal y pimienta

Cubierta:

Flores de brócoli 300gr

Queso port salut 200gr

Huevo duro 1

Manteca 30gr

Harina 0000 50gr

Leche 400 cc

Nuez moscada molida

Sal y pimienta blanca

Procedimiento:

Masa:

Licuar o procesar la espinaca con el huevo. Pasar a un bol, condimentar a gusto y luego agregar de a poco la harina con el polvo de hornear (agregar agua si hace falta). Se debe obtener una pasta semilíquida. Volcar en una pizzera aceitada y cocinar en horno fuerte por 20 minutos.

Cubierta:

Salsa blanca: derretir en una sartén la manteca, añadir la harina y revolver con una cuchara de madera. Cocinar 1 minuto y agregar la leche caliente. Cocinar hasta que la mezcla tome cuerpo revolviendo todo el tiempo para que no se formen grumos. Retirar del fuego y condimentar a gusto.

Pizza: colocar la salsa blanca sobre la masa de espinaca, sobre ella, las flores de brócoli y luego el queso y el huevo duro rallado. Llevar a  horno nuevamente hasta que el queso se derrita.

Espero que le tengan fe a esta receta y la prueben, es genial!!!

Para el postre!

Cheese cake de limón:

Hola a todos!!! Antes de olvidarme quiero agradecerles a los que comentaron, a los que se hicieron seguidores! Ojalá seamos cada vez más, pueden dejarme dudas o sugerencias para el blog. Lo hago para ustedes así que quiero que les guste y sobre todo que les resulte útil.

Hoy estoy con bastante apetito y, como pocas veces me pasa, tengo ganas de comer algo dulce. Soy esa clase de gente a la que lo dulce la relaja, pero hay ciertas cositas que no son tan dulces y me permiten darme un gustito.

Hace 2 semanas Marco y yo fuimos a cenar a la casa de una compañera suya de trabajo junto con otras parejas. La idea no era que alguien se pusiera a cocinar sino que habíamos planeado comprar choripanes recomendados enérgicamente por Ceci, la dueña de casa, quien ya los había probado. Llegamos a su casa y luego de un poco de charla compramos los  “chori”. Después de cenar, cuando nos estaba por explotar la panza, Cecilia sacó de la heladera una tarta de frutillas hermosa… además estaba riquísima! Una semana después ella y su marido, Luciano, vinieron a cenar a casa. Yo no podía ser menos, yo SOY cocinera! No puedo no ofrecer una comida o un postre hecho por mí. Marco se iba a encargar de la cena así que yo me ocupé del postre. Se me ocurrió hacer un cheese cake. Vuelvo a lo que dije arriba, hay cosas que no son tan dulces y nos permiten darnos un gustito a aquellos que no somos tan amantes de lo dulce. Y les cuento todo esto para darles la receta de mi cheese cake, que por cierto tuvo un éxito rotundo!

Ingredientes:

Masa:

Galletitas de chocolate molidas 200gr

Manteca derretida 100gr

Crema:

Leche condensada 1 lata

Queso crema 100gr

Azucar impalpable 100gr

Gelatina sin sabor 10gr

Jugo de 2 limones

Ralladura de 1 limón

Crema de leche 100gr

Procedimiento:

Masa:

Moler las galletitas con la multi procesadora, el accesorio picador de la minipimer o con un palo de amasar (poner las galletas dentro de un repasador atado y “darle masa”). Agregar la manteca derretida y mezclar. Colocar la mezcla en un molde para torta y aplastar con una cuchara. Llevar a horno medio por 5 minutos o bien llevar a la heladera hasta que endurezca.

Crema:

Batir la crema a medio punto (que tome un poco de consistencia pero no tanto como la crema chantilly). Disolver la gelatina en el jugo de limón sobre el fuego. Mezclar todos los ingredientes y colocar sobre la masa. Llevar a heladera por unas 4 horas, mientras más tiempo lo dejen, mejor. Se puede decorar con ralladura de limón o chocolate para taza rallado.

                              

Como verán, la receta es sencillísima… y deliciosa. En menos de media hora hacen un postre de 10 para quedar bien con quien les haga falta. Pruébenla y mucha suerte!!!

Para empezar la dieta!

Ensalada con tutti

Hola gente!!! Como sabrán, hoy en la ciudad de córdoba tuvimos una temperatura de 29°!!!!! UN MONTON!!! Sobre todo después del friazón que nos hizo hasta el fin de semana pasado. (Frío: significa frío lisa y llanamente. Friazón: es un frío muuucho más grande, más de lo imaginable!!! Es un modismo de la provincia de Córdoba que se usa en prácticamente todas las palabras, por ejemplo: peliculón, calorón,etc.) El día estuvo hermoso, hizo un calorcito primaveral que ya se estaba haciendo esperar demasiado.

Lamentablemente nada es perfecto. Con los primeros calores empezamos a sacarnos un poco de ropa, esa ropa que si bien nos molestaba y nos impedía movernos con comodidad y, porqué no, con gracia, también nos hacía la gauchada de taparnos los rollitos que fuimos acumulando durante el invierno…

PAREN DE SUFRIR!!! La salvación ha llegado. Yo sé muy bien lo difícil que es hacer dieta o empezar el gimnasio después de varios meses de permitirnos de todo porque “hace frío, necesito calorías” y cosas por el estilo. Déjenme contarles que se puede comer rico sin engordar tanto. Hoy les traigo una de mis comidas de verano preferidas. Es fresca y nutritiva y se puede hacer en dos versiones: Light y no tan Light. (Siempre va a ser mejor comer esto que comer un lomito con papas).

Bueno, basta de cháchara y vamos al grano. La receta de hoy es una súper ensalada que tiene de todo y es muy rica. Yo sé que la palabra ensalada suena aburrida, desabrida y escasa pero les prometo que ésta es rica y llenadora. Pruébenla y después me cuentan!

Ingredientes:

Ensalada:

Patamuslo 3-4

Tomates 2

Lechuga ½ planta

Zanahoria 2 chicas

Chauchas 150 gr

Cebolla 2

Pimiento rojo ½

Huevo duro 2

Vinagreta:

Jugo de un limón

Mostaza

Sal y pimienta negra.

Procedimiento:

Quitar la piel al pollo y hervirlo. Hervir las chauchas habiéndole retirado las puntas, es mejor cortarlas en 2 o 3 partes. Por otro lado cortar la cebolla y el pimiento en juliana y saltear con un poquitito de aceite. Reservar. Cortar los tomates en cuartos y luego en tiras. Rallar las zanahorias. Picar los huevos en pequeños trocitos.

Una vez listo el pollo se desmenuza y se coloca en una linda ensaladera. Se agrega el resto de los ingredientes y a último momento se corta la lechuga CON LA MANO!!!. Se mezcla todo y se condimenta.

Para la vinagreta: mezclar todo, cantidades a gusto y piaccere de cada uno!

Es importante que la lechuga se corte a mano porque de lo contrario se oxida rápidamente y se pone fea de aspecto… y como ya sabemos, la comida entra por los ojos!

Ojo, esta sería la versión Light.

Si quieren hacerla un poco más “pulsuda” pueden reemplazar la vinagreta por una reducción de aceto balsámico. Se coloca 300 cc de aceto en una cacerolita y se deja reducir a la mitad. Los sabores quedan más concentrados y ricos.

También se puede realizar una mayonesa casera para reemplazar el aceite… queda riquísimo!!! Pero esa recetita se las paso otro día (Y es máss fácil de lo que creen).

Espero les haya gustado y le den una oportunidad a mi ensalada. Bon apetit!

Pancitos saborizados

Una tarde en el parque


Hoy en la ciudad de Córdoba tuvimos una cálida tarde de feriado que aproveché para salir a pasear con Marco, mi marido, Gise y Lucas. Fuimos al parque de la ciudad para sentarnos en el césped a tomar unos ricos mates (cebados por Gise, porque si hay algo que a mí NO me gusta hacer es cebar mates, me tomo todos los mates que me ofrezcan pero NO los cebo!!!). Tipo 4 y media de la tarde nos empezó a dar hambre y no habíamos llevado ni una mísera galletita. Implorábamos al cielo y a todos los dioses existentes de la religión que fuera; que pasara cerca nuestro el vendedor de pastelitos. Sí, el mismo vendedor que tantas veces tildamos de "pesado" cuando no queríamos comprarle nada.
Como era de esperarse; el vendedor de pastelitos nunca pasó, pero sí pasó por nuestro lado un vendedor de pancitos saborizados. Le compramos 2 bolsitas de pancitos de salame que la verdad estaban espectaculares! Y es así como me nace la idea de contarles la receta de los pancitos saborizados.

Ingredientes:
Harina 200gr
Levadura fresca 10gr
Sal (bastante)
Manteca derretida 20gr
Extracto de malta (opcional) 5gr
Leche cantidad necesaria.

Procedimiento:
Disolver la levadura en un poco de agua tibia con una pizquitita de azúcar y dejar en un rinconcito cálido para que comience a trabajar. Formar sobre la mesa de trabajo una corona con la harina y colocar la sal por encima. Poner en el centro de la corona la manteca derretida, el extracto de malta, la levadura y un poco de leche. Mezclar todo hasta formar un bollo liso y dejar reposar para luego poder estirar la masa cómodamente (una media hora es suficiente).
Estiren la masa, no es necesario que quede muy finita). En ese momento se coloca el ingrediente saborizador que puede ser salame, queso rallado, aceitunas picaditas, cebolla salteada, o lo que se les ocurra. Volver a amasar y luego cortar con la mano en trozos del mismo tamaño y formar bollitos. Llevar al horno unos 20 minutos según el tamaño. La mejor manera de saber si están cocidos es abrir uno al medio y comérselo a escondidas!!!

Esta receta rinde aproximadamente 15 panes según el tamaño de los bollos que corten. 

Consejito: Cuando pongan la leche para hacer la masa, tengan en cuenta que siempre es mejor que sobre el ingrediente líquido y no que falte. Si falta líquido, la masa se vuelve demasiado dura y difícil de trabajar, en cambio, si sobra líquido, se agrega harina que es muuucho más fácil. En ese caso tengan en cuenta que también deberán agregar un poquito de sal para que no quede desabrido. 

En cuanto al extracto de malta, déjenme explicarles que no es más que un mejorador de masas utilizado en la panadería profesional. En casa no es necesario. No cambia el sabor y la diferencia de color casi ni se nota. Si no lo usan pueden pintar los pancitos con huevo para que se doren más.


Espero que disfruten de esta receta tanto como la disfruté yo en esta tarde preciosa que culminó con una vuelta en la montaña rusa más chiquita del mundo pero no por eso poco divertida. Me hacía cosquillita en la panza!!!

Milanesas de abadejo

La milanesa es una comida que nunca falla, no existe persona a la que no  le guste. Hoy en día es una de las alternativas para salir del paso gracias a que las carnicerías las venden ya preparadas, listas para comer. El problema es encontrar una milanesa que sea buena, que tenga más carne que pan. Una vez encontrada la buena milanesa hay que tratar de no cansarse de comer siempre la misma milanesa. Para ello acá les traigo una buena alternativa. Es una receta fácil, diferente y sobre todo muy sana.

Antes de pasar a la receta en sí, quiero darles unas recomendaciones para renovar esta delicia. Para preparar unas milanesas que se diferencien de las de la carnicería podemos usar no sólo otra carne (como en esta receta) sino también, otro "apanado". Se puede reemplazar el pan rallado por:
* galletitas de agua molidas.
* semillas de sésamo, lino, chia, girasol, calabaza, etc.
* avena.
* cualquier otra cosa que se les ocurra!

Bueno ahora sí, vamos a la receta.
Milanesas de abadejo
Ingredientes:
Abadejo 2 filetes
Pan rallado
Semillas (lino, girasol, calabaza, etc.)
Huevo 1

Procedimiento:
Pasar los filetes de abadejo por pan rallado (sin pasar por el huevo todavía). Ahora sí pasar por el huevo batido y condimentado a gusto y luego pasar por pan rallado mezclado con las semillas o sólo las semillas. Freír como milanesas comunes o, para obtener una comida más sana, cocinar en el horno pre calentado en un placa apenas aceitada por unos 10 a 15 minutos (el tiempo de cocción depende cada cocina).

Estas deliciosas milanesas se pueden acompañar con un clásico puré de papas, batatas, papas fritas o lo que más les guste.
Porciones: 2

¿Chef o cocinero?

Desmitifiquemos!


Me ha pasado un millón de veces que la gente me pregunte: ¿Sos chef? La verdad es que no señora, no señor, NO soy chef. Me cansé de explicarle a todo el mundo que un "chef" es un jefe dentro de la cocina y la cocina está poblada de cocineros con diferentes funciones. El "chef" es el encargado de coordinar las tareas de cada cocinero para que todos los platos estén listos en tiempo y forma.  Cabe aclarar que "chef" no es más que una palabra francesa que significa "jefe".

Entonces, como decía mas arriba, en la cocina hay varios cocineros. En una cocina lo suficientemente grande, se encuentra una brigada de cocina completa, detallada a continuación.
* Chef: el jefe, como ya dijimos.
* Sous chef: secunda las órdenes del chef (se puede decir que es como un vicepresidente).
* Demi chef: le da el toque final a los platos antes de sacarlos y controla las comandas. Todos los platos de una misma mesa deben salir al mismo tiempo, esto es lo que coordina el demi chef.
* Garder manger: es el encargado de cortar las carnes (obtiene los distintos cortes de vacas, corderos, aves y otros).
* Rotisseur: responsable de cocinar al grill (más conocido como plancha, también se considera a la parrilla dentro de este grupo). Es, además, el encargado de las frituras.
* Poisonier: limpia los pescados y mariscos.
* Entre metier: elabora las sopas, cocina pastas y huevos. (Mmm pastas!!!!)
* Patissier: se encarga de los postres y las masas (panes, pizas, tortas, helados, etc.)
* Saucier: elabora caldos, salsas madre y derivados.
* Bachero: es la persona que se encarga de lavar todo lo que los cocineros van utilizando así como los platos, copas, etc. usados por los clientes.

Es común que el trabajo del bachero esté menospreciado no sólo en la sociedad sino también dentro del ámbito mismo de  la gastronomía. Sin embargo, el bachero es parte tan fundamental de la cocina como cualquiera de los cocineros. Lo que quiero decir es que es importantísimo contar con un bachero en la cocina de un restaurante ya que los tiempos son, no tiranos, tiranísimos. Si el propio cocinero tuviera que lavar cada  herramienta que usa, cada vez que la necesita, los platos que normalmente tardan 20 minutos en salir tardarían al menos 35 o 40 minutos. Díganme si tienen ganas de esperar eso o más cuando están sentados en la mesa de un restaurante!!!... Sean sinceros!

Después de tantos tecnicismos y explicaciones que no son más que eso quiero que tengan muy presente que cualquiera puede cocinar, no hace falta estudiar gastronomía ni trabajar en un restaurante para poder deleitar a nuestros seres queridos con un rico plato de comida. No hace falta contar con los ingredientes más caros y exóticos. Lo único que se necesita es ponerle ganas y dedicarle el tiempo necesario. Entonces, a cocinar se ha dicho!!!